Los traders pueden mantener sus operaciones abiertas durante la noche y los fines de semana, permitiéndoles capitalizar los movimientos del mercado fuera de los horarios de trading convencionales.
Por ejemplo, un trader puede abrir una operación el viernes y cerrarla el martes, manteniéndola abierta durante el fin de semana y la noche del lunes.
Esta flexibilidad apoya tanto estrategias a corto como a largo plazo, permitiendo una gestión segura de las operaciones sin restricciones durante la competición.